Educación inclusiva para estudiantes con discapacidad

Educación inclusiva para estudiantes con discapacidad

“La discapacidad no debería ser un obstáculo para el éxito. Yo mismo he sufrido una neuropatía motora durante la práctica totalidad de mi vida adulta, y no por ello he dejado de desarrollar una destacada carrera profesional como astrofísico y de tener una feliz vida familiar” - Stephen W Hawking.

Sin duda alguna este reconocido físico es uno de los principales ejemplos que evidencia que tener una discapacidad no implica dejar de formar parte de la sociedad, por el contrario, hoy la tendencia mundial es a la inclusión y la normalización de esta población. 

Particularmente en nuestro país en materia de educación, desde el Ministerio del ramo, se viene abriendo camino la implementación de un enfoque inclusivo con el que se busca desestimular el aprendizaje separado e incorporar a niños, niñas y jóvenes con discapacidad al sistema educativo regular, dando la posibilidad de acoger en la institución educativa a todos los estudiantes, independientemente de sus características personales o culturales.

La adopción de este modelo de integración a la educación formal representa un gran desafío para el sistema educativo, ya que se requieren de espacios físicos adecuados para garantizar el acceso; docentes con una actitud abierta y flexible, metodologías que respondan a sus particularidades, así como especial sensibilidad entre la población escolar en general para entender la diferencia y ser incluyentes.

En situaciones particulares de estudiantes con discapacidad intelectual, se debe evaluar su nivel de discapacidad para verificar si cuentan con las condiciones para ser integrados a una institución de educación formal o requieren un programa de habilitación-rehabilitación, la cual se debe trabajar de forma concertada entre  gobiernos locales, salud, protección y educación.

Tipos de discapacidad:

Para facilitar su comprensión e intervención, la discapacidad se ha dividido en algunas categorías básicas a saber:  
-    Auditiva. Esta discapacidad puede manifestarse como pérdida profunda de la audición o sordera, o como una pérdida parcial que se conoce como hipoacusia. Así mismo puede presentarse en un oído o en ambos.


-    Visual. Contempla tanto la ceguera que es cuando la persona no ve nada en absoluto o como máximo, puede percibir la luz, como la discapacidad visual parcial, que es cuando la persona es capaz de distinguir la forma de los objetos, aunque con dificultad.


-    Física o Motriz. Se refiere a una dificultad para realizar movimientos que afectan el desplazamiento, al equilibrio, a la manipulación de objetos e incluso al habla y la respiración.


-    Cognitiva. Presenta dificultades en el nivel de desempeño en una o varias de las funciones cognitivas, en procesos de entrada, elaboración y respuesta que intervienen en el procesamiento de la información y, por ende, en el aprendizaje.   Las personas con discapacidad cognitiva poseen un potencial de desarrollo importante y capacidad de aprendizaje.  


-    Sordoceguera. Es aquella que presenta compromiso auditivo y visual el cual puede ser parcial o total.    Esta condición puede traer como consecuencia dificultades en la comunicación, orientación, movilidad y acceso de la información.   


-    Mental: Presentan una alteración bioquímica que afecta su forma de pensar, sus sentimientos, su humor, su habilidad de relacionarse con otros y su comportamiento.    


-    Múltiple. Son las personas que tiene más de una alteración (física, sensorial o  cognitiva), lo cual exige formas particulares, para aprender, conocer y actuar en el ambiente en el que se desarrollan.